Espero que, a partir de aquí, se profundice un intercambio que ayude a todos los jóvenes a adoptar, de una vez y para siempre, conductas saludables en la sensible, vital y maravillosa esfera sexual de nuestra apasionante VIDA, bien supremo que todos los protagonistas de esta historia y nuestros fervientes secuaces (docentes, padres, familares,etc.) nos empeñamos en cuidar y hacerla más plena.
Gracias, muchas gracias por todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario